Jesús nos invita a entrar a una relación de intimidad con el Padre. La intimidad que Jesús tuvo con el Padre durante su ministerio aquí en la tierra, le dio la capacidad de enfrentar los sufrimientos físicos y las luchas espirituales en la cruz cuando se hizo pecado por nosotros.

Loso niños no necesitan aprender a tener intimidad con su madre, sencillamente lo hacen naturalmente, pues esto viene con el nacimiento y ser parte de una familia. El amor les enseña como actuar y como responder. El amor les da el derecho a recibir sin reserva todo lo que su madre tenga. Así también es nuestra relación con Dios. Podemos esperar su amor y su intimidad con nosotros.

Oración:
Señor Amado, gracias porque podemos venir a ti  como niños llamándote Abba, Padre . Ayúdanos a entender que tu quieres que seamos como niños y así poder disfrutar de una intimidad natural contigo.